La masa de hojaldre es una masa muy antigua, que ha sido usada en infinidades de recetas tanto dulces como saladas. Va perfecto con muchos rellenos, todo lo que queda es ser creativo en la cocina, ya que la masa de hojaldre ofrece mucha variedad. El pollo es uno de los rellenos más perfectos para la masa de hojaldre, ya que su textura combina de maravilla con el hojaldre.
El hojaldre fue perfeccionado en la repostería medieval bajo influencia árabe, de hecho fue esta cultura la que trajo la masa de vuelta a Europa, ya que existen pruebas escritas de pastas hojaldradas en la antigua Grecia y el Imperio Romano. En España se conocen desde antes del siglo XVII y en Francia se le atribuye a dos cocineros, pero entre todas estas versiones es que se ha ido perfeccionando la cantidad de materia grasa que se necesita y cuántas veces se debe doblar la masa para que tenga esa textura.
Se ha tomado como una receta navideña ya que el proceso de amasado puede ser largo y por esa razón en las familias deciden hacer sus distintas versiones durante Navidad. Además el pollo es perfecto porque tanto pequeños como adultos lo consideran una de sus carne favoritas y también es muy versátil, puede ir con muchos ingredientes y darle humedad a la masa de hojaldre.
Esta receta se puede realizar en un gran pastel o trenza de hojaldre, con el respectivo relleno de pollo; pero la otra versión es hacer pequeños pastelitos cuadrados, pero con el mismo relleno esto funciona como entremés para las reuniones con amigos y familias. Lo importante es que se logre presentar una buena masa de hojaldre y por supuesto un exquisito relleno.
