Este plato es de tradición en España, a pesar de poseer orígenes muy humildes, a la vez significa la unión de las familias y los amigos a través de la comida. Como todo plato tradicional, se ha extendido por todo el territorio español, e inclusive tiene sus propias versiones en los países hispanos.
Tradicionalmente, se cocina en caldero de peltre o cobre, de ahí el nombre. También era habitual que fuera preparado en grandes cantidades y al aire libre, para un evento especial o reunión, las calderas eran un utensilio básico de la época, y toda la familia y amigos se reunían en torno a ella para disfrutar de una buena comida y una buena conversación.
En esta versión clásica se utiliza la carne del cordero, una carne muy querida en las familias españolas, pero puede utilizarse cualquier tipo de carne, pescados o mariscos combinados con distintas verduras y legumbres que varían dependiendo de la estación o la región.
Normalmente, se cuece en una reducción de vino, que dependiendo de los ingredientes puede ser tinto o blanco. Pero eso solo aporta un fuerte sabor que se complementa con los demás. Al ser un plato de cuchara funciona perfecto en los meses fríos, además de aportar los nutrientes necesarios para que sea una comida suficiente, de esa forma todo el que prueba la caldereta queda satisfecho con lo que comió, aunque es posible que repita debido al sabor de esta comida.